Analiza PIPE-CIDE acciones transnacionales educativas para estudiantes migrantes de retorno
Miércoles, Jun. 19, 2019
 
Analiza PIPE-CIDE acciones transnacionales educativas para estudiantes migrantes de retorno


Ciudad de México, 19 de junio de 2019.
Cuando niños y jóvenes migrantes regresan a México suspenden su educación. Se enfrentan a una serie de trámites legales para identificarse y poder tener acceso al sistema educativo, que es muy distinto al de Estados Unidos. Su integración al nuevo ambiente puede ser bastante difícil, empezando por el idioma, discriminación y choques culturales. Se encuentran vulnerables.

México ha hecho esfuerzos para facilitar la inclusión escolar y de identidad de niños y jóvenes que regresan. Sin embargo, han tenido un alcance limitado.  No hay políticas educativas para programas transnacionales o de idiomas para que esta población siga desarrollando sus habilidades lingüísticas y potencialice los conocimientos aprendidos previamente en el sistema educativo norteamericano.

The ethics of return migration and education: transnational duties in migratory processes es un artículo publicado en Journal of Global Ethics y elaborado por los profesores investigadores del Programa Interdisciplinario de Políticas y Prácticas Educativas (PIPE) del CIDE, la Dra. Mónica Jacobo y el Dr. Juan Espíndola, que aborda la problemática existente en las políticas migratorias educativas para niños y jóvenes.

«La migración México-Estados Unidos es un caso único de migración internacional en el mundo. Hay más de 100 años de historia sobre el flujo migrante entre estos dos países y recientemente este flujo migratorio se ha invertido. Ahora más mexicanos regresan a su país. Además, se aborda por un tema de política pública y justicia social, de cómo diseñar programas que los atienda de la mejor manera posible. Son niños que tienen problemas para poderse integrar a la vida educativa mexicana», explicó la Dra. Mónica Jacobo.

Este artículo sostiene que las normativas para migrantes con frecuencia descuidan una dimensión muy importante: no logran entender que los hijos de familias migrantes (hayan nacido o no en el país donde se encuentran viviendo actualmente) deben tener una educación funcional, que les permita integrarse rápidamente a su nación de origen, en el caso de un retorno prematuro o planeado.

El fenómeno de la migración de retorno

Los flujos migratorios entre México y Estados Unidos no son unidireccionales, más bien se caracterizan por tener una naturaleza circular; las personas salen de su país de origen y retornan en cualquier momento, bajo las circunstancias que sean. Un fenómeno que incrementó entre estas dos naciones en los últimos 10 años.

El Dr. Espíndola explicó porque se ignora la naturaleza de los flujos migratorios circulares «hay dos razones: son pocos los migrantes que conciben su trayectoria como circular, es decir, la mayoría tienen planes de quedarse en el nuevo país. La segunda razón tiene que ver con que muchos académicos que estudian el fenómeno México- Estados Unidos sí encuentran o quieren darle una solución a lo que ellos encuentran más próximo que son los estudiantes que quieren hacer una vida en Estados Unidos. Entonces para ellos lo más importante es darles las herramientas necesarias para que ellos vivan allá. Atienden el problema inmediato».

A través de mapeos hechos por la Dra. Mónica Jacobo, los estados fronterizos como Chihuahua, Tamaulipas y Baja California, así como algunas entidades del centro del país como Guanajuato, Ciudad de México y Estado de México son lugares donde se registra mayor migración de retorno.

«Es importante saber dónde están porque a diferencia de Estados Unidos nosotros tenemos una proporción pequeña de alumnos migrantes dentro de nuestra población de alumnos en general. Es un grupo que está creciendo, pero aún son pocos en proporción al resto de la población», puntualizó la Dra. Mónica Jacobo.

Propuesta para una educación bicultural

The ethics of return migration and education: transnational duties in migratory processes, propone que los países actúen conjuntamente para brindar oportunidades educativas óptimas a niños y jóvenes migrantes. Las naciones tienen la obligación de ofrecer educación bilingüe y que involucre aspectos culturales e históricos de ambas partes para contrarrestar los choques culturales.

Actualmente no existen planes de estudio, ni practicas pedagógicas adecuadas para los perfiles biculturales y bilingües de la población en edad escolar que regresa a México. Las consecuencias de no contemplar la situación de niños y jóvenes migrantes son la precarización de sus oportunidades de trabajo y como resultado mayor talento perdido.

El Dr. Juan Espíndola señaló que se deben tomar en cuenta varios factores que consideren la condición del migrante binacional. Destacan la poca flexibilidad del sistema educativo mexicano y la falta de recursos para atender a esta población.

De acuerdo con la investigación realizada por los Dres. Jacobo y Espíndola, para comenzar a trazar un camino de inclusión e igualdad de oportunidades educativas a los hijos de migrantes en México, es necesario contar con programas de sensibilización multicultural para profesores, así como proporcionarles estrategias pedagógicas para enseñar a los niños que no hablan español.

Sin embargo, los recursos humanos y económicos para llevar a cabo el proyecto son limitados. Proponen que los esfuerzos deben comenzar a implementarse en determinadas regiones del país y enfocarse en comunidades con una alta tasa de retorno.

En el artículo se sugiere la creación de programas extracurriculares para que los hijos de migrantes que llegan a México puedan desarrollar su alfabetización en español y se pongan a la par con los planes de estudio de las escuelas nacionales. En cuanto a los mexicanos estudiantes que se encuentren en Estados Unidos, se propone que se habiliten cursos para que aprendan en su lengua materna. Además, sería adecuado diseñar contenidos relacionados con la historia y la geografía de México, con el objetivo de hacer la transición entre los sistemas escolares sin tener tantos choques culturales.

«Hay temas que difieren totalmente, como historia y geografía. Debe haber programas complementarios que permitan que estos chicos puedan transicionar entre un sistema educativo y otro sin rezagarse y sin perder este tipo de información que es muy importante para cada país», comentó la Dra. Jacobo. Para lograr los objetivos es necesario capacitar a profesores y tener días escolares con más horas.

La investigación concluye que el tipo de educación bicultural y bilingüe que se propone a través del análisis es responsabilidad de las sociedades involucradas en un flujo migratorio. Puedes revisar el artículo en  The ethics of return migration and education: transnational duties in migratory processes.

 


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